martes, 12 de junio de 2012

La historia de Las Mujeres Son Malas Los Hombres Son Buenos Por Naturaleza


Desde que me casé, he estado observando profundamente el comportamiento matrimonial para saber en que punto es que el matrimonio se acaba. Muchos nos decían que la felicidad duraba solo un año, otros nos decían que solo tres y otros cinco. Todavía no sé si desde mi punto de vista pueda ponerle un fin determinado a un matrimonio.
Lo que si puedo decir con conocimiento de causa, es que el matrimonio me ha ayudado a ver la bondad masculina, antes velada para mi en muchos aspectos. Empecé a reconocer acciones desinteresadas y nobles por parte de mi esposo, que contrastaban con mis elucubraciones mentales femeninas. Y digo femeninas haciendo referencia también a algo que no es ajeno a todos nosotros, y que confirma un comportamiento bien establecido entre las mujeres. Tanto es así que lo tienen bien identificado en las novelas que vemos a diario en Colombia y en muchos países del mundo. Esa maldad y manejo concienzudo de la situación, cualquiera que sea, es bastante femenina.
Pero para llegar a ciertas conclusiones decidí observar el comportamiento de otros hombres, aquellos con los que compartía a mi alrededor. Comencé a ver comportamientos ingenuos y simples con respecto a sus esposas.
En ellas yo observaba mis actitudes, mi forma de hablar y de mandar.
Tuve una ruptura de nivel al darme cuenta que mis comportamientos se repetían y repetían en muchas mujeres y por el contrario el comportamiento de mi esposo se repetía y se repetía en otros tantos que nos rodeaban.
Ese hallazgo fue sorprendente y difícil de explicar al compararlo con unos cuantos hombres malignos que salían por televisión, que ayudaban a seguir desdibujando esa ingenuidad, simpleza y bondad que yo veía a diario, en los hombres que observaba.
Eso me animó a buscar estadísticas y otros escritos con respecto a la masculinidad. Con esto también me di cuenta que además de todo, los hombres están siendo maltratados como nunca antes en la historia, y eso no es tan público en los noticieros.
Creo que necesitamos una humanidad reconciliada tal como lo dice Florence Thomas,pero esa humanidad reconciliada no se logrará mientras una de las partes sea más escuchada y más protegida por parte de los medios. El maltrato viene de muchos frentes, no solo del físico. Los morados son la evidencia física, pero hay otro maltrato que no se ve y que también hay que darle la misma importancia.

viernes, 8 de junio de 2012

LA HISTORIA DE LA ENTRADA DEL BARCELONA Y EL REAL MADRID A NUESTRO FUTBOL COLOMBIANO


Cuando mi hijo era pequeño, recuerdo que le gustaba un equipo colombiano. Nosotros como buenos padres y familiares le regalábamos muchas cosas de su equipo predilecto. En una ocasión, por situaciones familiares el dejó su gusto por ese equipo. A cambio de ello comenzó a fijarse en un equipo español, el Barcelona.
En aquel momento nos pusimos muy contentos junto con mi esposo, de no estar alimentando las barras bravas del futuro. Pensamos que él no iba a estar en peligro de muerte si llevaba una camiseta del Barcelona, pues esa no se parecía tanto a alguna del fútbol colombiano.
Sin embargo no sé en que punto de la historia me perdí, y ahora veo que la pasión de los europeos por su fútbol se ha trasladado a nuestra idiosincracia colombiana.
Creo que las cosas han cambiado muchísimo y no tengo muy claro en que punto sucedió. Ahora me he subido a varios taxis que han estado escuchando partidos de la Copa Del Rey o de otras copas del fútbol europeo.
Pero lo increíble de todo es que por las redes sociales se ve una lucha casi a muerte por los equipos europeos, especialmente entre los hinchas del Real Madrid y los del Barcelona. Son unas barras bravas a nivel mundial y no local como estábamos acostumbrados en Colombia.
Se puede apreciar a alguien por internet, pero si es hincha del otro equipo tal vez puede bajar el aprecio ostensiblemente.
Según lo que percibo en las redes sociales, ambos equipos tienen al mejor jugador del mundo.
Pero  lo verdaderamente increíble es estar viva para poder ver estos cambios tan radicales  en la vida de nuestro país, de nuestros hijos y de los hijos de otros padres de otras latitudes, gracias a la globalización.

martes, 5 de junio de 2012

UN VIOLADOR DAÑA A LAS MUJERES Y A LOS HOMBRES TAMBIÉN

Estos casos que hemos visto en Colombia y a nivel mundial sobre maltrato a las mujeres y en otros casos a hombres también, muestran un panorama muy desalentador para la humanidad. Pero lo que estos psicópatas no alcanzan a imaginar es que sus actuaciones perversas causan un daño irremediable no solo a sus víctimas sino también al género masculino, que cada vez está mas  demeritado  y maltratado no solo por las mujeres sino por el estereotipo de la sociedad, que acaba con todo.
Las noticias se centran en todo esto alimentando nuestra morbosidad, pero al mismo tiempo generando un clima de temor hacia todo hombre que se cruce en nuestro camino.
Cualquiera que tenga gafas o la cabeza calva como la del violador que aparece en la televisión es susceptible de ser observado detenidamente para mirar todos sus comportamientos "sospechosos".
El daño es irreparable, tanto así que muchas mujeres están solteras, porque creen que todos los hombres son muy malos y por eso para ellas es mejor estar solas que mal acompañadas.
Creo necesario mirar a los hombres desde una perspectiva muy diferente a la de los medios de comunicación, rescatando observaciones profundas a su verdadero yo, para poder encontrar en su interior lo que ellos realmente son.
 La pregunta clave es ¿Cuantos hombres malignos conoce a su alrededor? Por que como lo dice G.K. CHESTERTON en su libro "El amor o la fuerza del sino"; en nuestro trabajo o en nuestro hogar esta la humanidad representada. Seguramente tendrá una oveja negra en la familia como todas las tenemos, pero no creo que todos sean ovejas negras. De esa misma manera, no todos los hombres de la humanidad son ovejas negras, ellos los malignos, solo son una minoría.

viernes, 1 de junio de 2012

LA NECESIDAD DE RESPETO LE HIZO COMPRAR UNA NUEVE MILIMETROS



En el último viaje a San Andrés, conocimos con mi esposo a un hombre muy simpático que me dejó bastante consternada por su exagerada necesidad de ser respetado. Todas sus conversaciones giraban en torno al respeto. Lo más increíble fue que compró una pistola 9 milímetros para defenderse en una isla donde realmente eso no es necesario. No es que allí no exista maldad, pero no es una gran ciudad como para tener que andar armado por supervivencia. Entonces finalmente nos dimos cuenta que la pistola la compró no para defenderse sino para que lo respetaran.
Era tal su necesidad que pensaba matar a un hombre que le quedó debiendo 240.000 pesos por una apuesta que él había ganado y no se la había pagado. El otro hombre era un adicto al juego; así que muy probablemente el dinero que se ganaba no iba a ser precisamente para pagar apuestas sino para gastarselo nuevamente en su adicción al juego. Nuestro amigo sanandresano lo iba a matar no porque necesitara el dinero, porque como podemos ver no era lo suficiente como para estar años en la cárcel, además el no lo necesitaba tampoco porque vivía bien. Simplemente lo quería matar porque los demás se podrían burlar de él al ver que no se hacía respetar para que le pagara el dinero.

Es increible pero cierto, prefería pagar varios años en la carcel por 240.000 pesos que soportar que los demás lo vieran como poco hombre irrespetado.

Pieso que las mujeres deberíamos ser más cuidadosas con el respeto hacia los hombres que nos rodean. Este es un caso extremo de necesidad de ser respetado, pero si observamos bien esta dosis varía de un hombre a otro, pero que se necesita se necesita. Y eso es importante tenerlo en cuenta para proporcionar lo que otros requieren.